"La normalidad no es mala, lo malo es no tener algo anormal para disfrazarla, para no verla, para no sentirla, lo malo son los segundos que proceden a ese suspiro, esos que nos dicen que lo atípico se ahogo en lo cotidiano, lo malo es sentirse un pétalo en un matero de flores, o una víbora entre un puñado de serpientes, o un hielo más en este vaso ya casi vacio..." y surgieron millones de analogías más que no hacen falta mencionar...
Conversa de sábado por la noche, con una extraña conocida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario